miércoles, 28 de julio de 2010

SOBRE DICHOS Y HECHOS Columnista Invitado: Ariel Arias


Leía hace algunos días en diarios nacionales “La Pampa es la provincia con la tasa de crecimiento más baja en el orden nacional”
Algún oficialista podría opinar que es parte de la campaña del periodismo opositor.
El pasado jueves 22, cuando el Gobernador visitó Realicó para la entrega de viviendas lo admitió. Pero argumentando que ese es el precio por años de sequía, tasas de interés bajas en tarjetas de crédito del BLP, créditos para empresas a diez años a baja tasa de interés, etc.
Señor Gobernador: con respeto, me viene a la mente una frase que dice: “las excusas son las justificaciones de la incapacidad”. Incapacidad que han demostrado los sucesivos gobiernos desde el año 1983 a la fecha, para dar respuestas con políticas adecuadas en las distintas áreas y así poder crecer –como mínimo- al ritmo que lo han hecho provincias vecinas.
Dependemos de una economía predominantemente agrícola ganadera, pero en los conflictos del sector hace algún tiempo, su gobierno no solo no salió a buscar soluciones, sino que se alineó con la confrontación que proponía y lo sigue haciendo el gobierno nacional. Ese mismo gobierno que usted apoya es el que provoca que hoy nos veamos sin stock ganadero y con exportaciones restringidas. Entonces se cierran o paralizan frigoríficos como Pampa Natural (Speluzzi). Aquí fueron créditos del Estado que hoy no se están pagando.
Esto también es un ejemplo de falta de planificación de la economía.
Me gustaría tener un gobierno que reafirme lo que recita en los discursos oficiales con los actos cotidianos de la gestión.
Pongo a título de ejemplo:
En las entregas de viviendas se insta a los adjudicatarios a que paguen su cuota porque es un sistema solidario, que le permitirá a otro futuro adjudicatario tener una vivienda. Comparto eso plenamente, pero también recuerdo que en el IPAV, Agüero y Araníz fueron los responsables del faltante de casi u$s un millón que eran de los adjudicatarios que pagaron religiosamente su cuota.
El gobierno exige el pago de impuestos para poder realizar obras. Con el dinero que faltó en la oficina de la DGR, en Realicó, seguramente nos vamos a ver privados de alguna obra. A los ciudadanos particulares los municipios les exigen planos para realizar cualquier construcción, por cuestiones de urbanismo y seguridad. Cosa que comparto plenamente. Ahora digo, ¿Por qué al Estado se le caen polideportivos (Ataliva Roca), no pueden techar el Megaestadio de Santa Rosa? ¿Por qué ceden cimientos, se caen líneas eléctricas de alta tensión por bases deficientes? O algo más reciente: dos viviendas en Winifreda se quedaron sin vereda, porque en el lugar de ésta pasa un canal de desagüe a cielo abierto.
Por cosas como estas, el mensaje que el gobierno nos da a los pampeanos no es del todo creíble.
Anhelo como pampeano un gobierno que no solo se limite a “pagar los sueldos en término”, “tener una administración ordenada”, “tener una reserva de dinero para cubrir los baches de la coparticipación” que Nación no paga… Sino que haga de la política la herramienta transformadora para que La Pampa salga de este letargo al que nos han llevado las últimas décadas de gobierno.
Ariel Arias.